Definida como un dolor a nivel muscular que presenta períodos de agudización la fibromialgia es una dolencia que afecta cada vez a más personas en el mundo entero.
Entre las técnicas y terapias corporales más adecuadas para tratar la fibromialgia es elMétodo Pilates, ya que reúne los elementos y condiciones necesarias para adaptarse a cada paciente y a través de sus ejercicios es posible dar una solución a esta dolencia.
El Método Pilates tiene la ventaja de ser un tipo de entrenamiento consciente y por ello quien lo practica logra con el tiempo adquirir un perfecto control sobre sus movimientos, ayudando a mantener una buena postura, sumando una respiración eficiente recibiendo por ello el nombre popular de Yoga Occidental.
Como tratamiento de la fibromialgia, Pilates hace un abordaje terapéutico de esta dolencia logrando a través de ciertos ejercicios un alargamiento axial de la columna, aprender un respiración controlada y también fluida, además de llevar a un correcto alineamiento articular con movimientos eficientes.
La respiración es entonces una de las características más importantes para facilitar la articulación de la columna vertebral además de prevenir lesiones y facilitar el deslizamiento escapular. En relación al alargamiento axial se hace referencia aquí a la ejecución deejercicios Pilates buscando lograr un alargamiento de la distancia entre las vértebras.
Asimismo, cuando la tensión en los hombros y la columna dorsal es demasiado intensa puede causar un trastorno en estas zonas poniendo en peligro vértebras, articulaciones y músculos intercostales, de allí la importancia de una buena organización que sirve para relajar la zona cervical y también la torácica.
Por último, lograr un alineamiento correcto de las extremidades tanto superior como inferior es de suma importancias para que la transferencia de fuerzas sea eficaz.
El Método Pilates amplía las posibilidades de obtener un gran beneficio por parte de los pacientes que necesitan aliviar y con el tiempo solucionar el problema de la fibromialgia.
El Pilates previene la aparición de osteoporosis, evita fracturas en el caso de que esta enfermedad ya se haya instaurado, mejora patologías como la fibromialgia y puede ser un complemento inestimable para la fisioterapia en la rehabilitación de lesiones.
Así lo ha explicado Ángela Río, directora de Formación Continua y Postgrado en Pilates de la Universidad Europea de Madrid, con motivo de la presentación de los cursos de Stott Pilates, la modalidad tradicional considerada más contemporánea, que va a impartir dicha universidad durante los meses de mayo y junio.
El Pilates es una disciplina que busca conseguir el equilibrio del cuerpo corrigiendo errores posturales y fortaleciendo la musculatura interna y externa. Esto se consigue trabajando en primer lugar la musculatura interna del abdomen y el suelo pélvico, y a partir de ahí, todo lo demás. Los métodos para llegar a este objetivo son la contracción de los músculos y la respiración.
"Hay que tomar conciencia de partes del cuerpo que generalmente nos pasan desapercibidas", según Río.
El resultado final es que toda la musculatura se fortalece de manera mucho más profunda y estable, lo que en una persona sana previene la aparición de lesiones y en una con una patología mejora muchos aspectos.
Beneficios
En otras áreas, teniendo en cuenta que el Pilates mejora la circulación de todo el cuerpo, aumenta también la absorción del calcio y se disminuye el dolor por vicios posturales, con lo que se previene la osteoporosis, el dolor de espalda y la fibromialgia. El fortalecimiento de los músculos evita, además, fracturas si ya hay disminución de masa ósea.
El Pilates se recomienda especialmente para quien padezca dolores en la espalda, tenga posturas viciadas, una hernia y, en general, para cualquier persona que quiera mejorar su tono muscular. "Al trabajar fundamentalmente el abdomen, los músculos se tonifican y también se reduce volumen".
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